Javier Garayoa es el director general de Spainsif, el Foro Español de Inversión Sostenible, que ha participado activamente durante la COP25 con un stand en la Zona Verde y con presencia en diferentes encuentros como el que organizaron el día 9 sobre “La inversión sostenible como palanca para la contribución climática”. En él participaron los cinco vicepresidentes de Spainsif que coincidieron en señalar el momento histórico que vive la inversión sostenible para contribuir a frenar el cambio climático y cumplir con la Agenda 2030.

¿Cómo habéis vivido desde Spainsif la COP25?

Para Spainsif ha sido la primera Cumbre del Clima que hemos vivido en directo y la experiencia ha sido muy positiva. Dentro de la Zona Verde de la COP25, destinada a la sociedad civil, hemos compartido espacio con Foro de Impacto y Ascri (Asociación Española de Capital, Crecimiento e Inversión) en el que durante dos semanas hemos contado con una agenda conjunta que ha incluido diferentes encuentros en los que se ha analizado el papel de las finanzas sostenibles y la inversión de impacto como motores para frenar el cambio climático. Durante estos días hemos tenido la oportunidad de captar el interés de la sociedad civil que se ha preocupado por conocer el proceso de cambio hacia una economía descarbonizada y el rol que juega la inversión y las finanzas sostenibles para que se lleve a cabo.

La COP25 dedicó el 9 de diciembre a las finanzas sostenibles…

Es bueno que durante la Cumbre del Clima se dedicara un día específico a las finanzas sostenibles, pero durante estas dos semanas, desde Spainsif hemos echado de menos que la inversión y las finanzas sostenibles hubieran tenido mayor protagonismo porque son el motor para que el proceso de cambio de modelo económico y energético se lleve a cabo. Hace poco el Banco Europeo de Inversiones anunció que harían falta 400.000 millones de euros anuales hasta 2030 para transitar hacia una economía baja en carbono y llegar a ser neutra en 2050. El sector financiero y las finanzas tenían que haber tenido un mayor protagonismo durante estos días porque van a ser fundamentales para que esa transformación se produzca, pero también es verdad que no esperábamos el interés tan grande que han tenido las finanzas sostenibles durante la COP y nos ha sorprendido favorablemente porque no sólo se trata de profesionales sino de la sociedad civil y de los ciudadanos que se hacen preguntas sobre cuál debe de ser el proceso de cambio en el que estamos involucrados.

La necesidad de esa urgencia climática ha marcado la COP25, pero también es verdad que nos hemos empezado a preguntar más como ciudadanos con qué medios contamos para esa transición energética justa y desde Spainsif estamos decididos a ser el punto de encuentro para impulsarla en España desde los bancos, aseguradoras, gestoras de activos, sociedad civil y mundo académico.

¿Qué balance haces de la COP25?

Desde el punto de vista global nos hubiera gustado que los estados hubieran manifestado un compromiso mayor para acelerar la hoja de ruta que se estableció en el Acuerdo de París en 2015 y que va a tener que esperar a la COP26 de Glasgow. Sin duda, los estados podrían haber sido más ambiciosos. Desde el punto de vista de la inversión sostenible necesitamos un mayor compromiso de volúmenes de inversión anuales para acelerar la transición hacia una economía descarbonizada.  

¿Qué papel ha jugado la sociedad civil durante la Cumbre del Clima pidiendo a los gobiernos y empresas que aceleren esa transición?

La sociedad civil y los ciudadanos cada vez estamos más concienciados en que es necesario impulsar políticas y medidas para frenar el cambio climático y así lo hemos vivido durante esta COP25 en el stand de Spainsif. Por eso, creo que el mejor activismo que podemos ejercer como ciudadanos es demandar productos sostenibles en nuestra