Dedicado a Nathalie.
Gracias por la inspiración.
Hace unos días, disfrutando de una barbacoa con familia y amigos, se coló entre nuestras conversaciones el tema de la crisis: que si los políticos, que si el sistema, que si el banco…
De pronto Nathalie nos dice: “¡yo tengo una solución!”. «Me extrañó que alguien viniese con una propuesta entre tanta queja, por lo que continué escuchando con interés. “Yo lo que haría es seleccionar a un grupo de amas de casa de España y las haría gestionar los presupuestos públicos.”
“¿Y eso?” – respondí con cara de sorpresa.
“Pues mira, es muy lógico: una ama de casa no antepondría sus intereses a los de su familia; se aseguraría de tener comida suficiente y variada para su familia; cuidaría de la salud de su familia y buscaría darle la mejor educación posible a sus hijos; buscaría vivir en una casa bonita y limpia”.
“Y te digo más” – añadió. “Además de todo esto, estoy segura de que le sobraría dinero para algún que otro extra: ir al cine, disfrutar de unas buenas vacaciones, comprarse un coche o darse un lujo de vez en cuando”.
En cuatro frases no pudo dejar más claro que cuando nuestros gobiernos anteponen sus intereses corporativos e ideológicos al bienestar de su población y dedican más recursos a los servicios e infraestructuras de lujo que a los servicios básicos (educación, vivienda y salud), el sistema falla y quiebra.
Creo que más de un político debería dar clases particulares con alguna ama de casa. Si fuese así, los políticos no permitirían que:
Durante unos años, los economistas y gobernantes creyeron que liberalizando la economía y los mercados, y adelgazando el Estado de Bienestar, el mercado se auto-regularía, ofreciendo las mismas oportunidades a todas las personas. Pero como nos cuenta Joseph Stiglitz en esta entrevista concedida a “El País”, al parecer “EEUU es la sociedad con menos igualdad de oportunidades entre todas las naciones avanzadas” probablemente debido a la desregulación, a la bajada de impuestos a los más ricos y al aumento de las desigualdades sociales. De hecho, en EEUU 150 millones de personas son pobres o tienen una renta por debajo de la media, según el último censo de población, es decir, 1 de cada 2 habitantes mientras que la paga media de los grandes ejecutivos de Wall Street subió un 20% el último año.
Quizás lo que le falte al modelo estadounidense y al modelo español es alguna que otra ama de casa en sus gobiernos. Si fuese así estoy segura de que no permitirían que algunos hijos los tuviesen todo y algunas hijas nada.
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