Un año más hemos venido al encuentro Sustainable Brands que se celebra este año en San Diego, California.  ¿Por qué venimos? Principalmente por tres motivos:
Aprender: Estados Unidos a través de sus empresas y colectivos asociativos es vanguardia en incorporar la sostenibilidad desde la dimensión de negocio y activismo social.
Respirar: En España seguimos siendo muy endogámicos, por no decir pesados, en lo relativo a la RSC y gracias a la innovación social un poco menos en lo relativo a modelos y prácticas alternativos en el campo de la sostenibilidad, pero, creo, desde una visión de excesivo cuestionamiento respecto al mundo empresarial.
Reflexionar: Vivimos tiempos complejos, más allá de la propia economía, y esto en Quiero salvar el mundo haciendo marketing lo estamos viviendo de forma muy intensa: qué hacemos, qué es cosmético, qué no, qué es justo, qué es positivo, qué es ser pragmático qué no haremos nunco. Personalmente no tengo la respuesta a todas las preguntas y tampoco me las van a dar aquí. Pero estoy seguro de que nos ayudará a avanzar por el tortuoso y maravilloso mundo de la consistencia.
Tenemos cuatro días para poder compartir y contrastar nuestras experiencias y reflexiones con los profesionales que están marcando la hoja de ruta en Estados Unidos en esto de aplicar la sostenibilidad desde una dimensión de negocio. Mola. Mientras que en algunos enfoques se trabaja para las memorias de sostenibilidad impresas en papel FSC, en otros modelos ya se está trabajando en el puritito negocio que es lo que genera la puritita transformación.
Os iremos contando y a ver si somos capaces de que KoAnn, su fundadora, nos de su visión de la cosa.
Un abrazo desde San Diego.